Comunicación efectiva en Pareja
No es ningún gran secreto que la comunicación es una parte importante de cualquier relación. Lo que menos se comprende es cómo ser un buen comunicador y cuán beneficioso puede ser desarrollar buenos hábitos de comunicación en su relación.
Y aunque no existe una solución única y sencilla para hacer que esto suceda, existen algunos consejos clave de comunicación que pueden ayudar tanto con las conversaciones difíciles como con una buena comunicación en el día a día.
1. No barra cosas debajo de la alfombra
Nuestro primer consejo para hablar es simplemente: ¡pruébalo! Puede ser muy tentador evitar las conversaciones difíciles para mantener la paz o porque te preocupa ser tonto. Pero el riesgo de esto es que sigues posponiendo hablar de las cosas hasta que finalmente te rompas porque la tensión se ha ido acumulando con el tiempo.
Es mejor sacar las cosas pequeñas a la luz y hacer esto con regularidad en lugar de tener grandes discusiones que corran el riesgo de dañar su relación. Por supuesto, eso no significa hacerle reprimir a tu pareja cada pequeña cosa; siempre será importante poder dejar ir las pequeñas cosas, pero si hay cosas que parecen molestarte una y otra vez, es mejor. discutirlos que mantenerlos reprimidos.
2. No lo pongas a la defensiva
Es muy fácil reaccionar ante un desacuerdo con tu pareja diciéndole todo lo que crees que está haciendo mal y haciendo muchas acusaciones. Pero el problema con esto es que solo los pondrá a la defensiva.
En la consejería, a menudo recomendamos que las personas intenten usar declaraciones en primera persona. Esto significa hablar principalmente en términos de cómo las cosas han hecho tú sensación. Aunque puede parecer un poco clínico, es posible que desee intentar decir: ‘cuando lo haga X, me hace sentír y‘.
Poner el foco en ti mismo de esta manera significa asumir la responsabilidad de tus sentimientos y es mucho menos probable que tu pareja se sienta atacada. Es un cambio simple, pero que realmente puede cambiar el tono de un desacuerdo y hacer que sea menos probable que se salga de control.
3. Elige un lugar y una hora
No se trata solo de lo que dices y cómo lo dices, sino también de dónde y cuándo. A veces, es útil planificar una discusión en un momento y lugar específicos.
Esto tiene algunos beneficios. Cuando reserva tiempo, significa que puede prestar toda su atención a la conversación y no está tratando de encajar antes de hacer otra cosa, como salir o acostarse. Si estuviera tratando de tener una reunión de negocios importante, normalmente no trataría de encajar mientras camina por el pasillo, entonces, ¿por qué hacemos lo mismo con tanta frecuencia con nuestras relaciones?
Además, cambiar de ubicación puede significar cambiar tu forma de pensar. Si ha estado discutiendo mucho en casa, puede asociar el espacio con los mismos patrones. Ir a otro lugar, o incluso hacer otra cosa mientras habla, como conducir o caminar, puede ayudarlo a cambiar a una mentalidad diferente.
4. Toma un tiempo para hablar y escuchar
Tendemos a asumir que la comunicación se trata de hacerse oír, pero esto es solo la mitad. También es tan importante que se escuchen.
La mayor parte del tiempo, cuando tenemos una discusión, solo esperamos nuestro turno para hablar. Escuchamos lo que dicen, pero concentramos nuestra respuesta: ‘eso no es cierto, eso me molesta mucho ‘. Esto es comprensible: a nadie le encanta escuchar algo con lo que no está de acuerdo. Pero para comprender realmente la perspectiva de su pareja, realmente debe prestar atención y asimilarla.
Puede resultarle útil utilizar el siguiente patrón simple: una persona habla, la otra escucha y luego parafrasea lo que dijo: «lo que parece que estás diciendo es …». Y luego cambia. Una vez más, suena un poco clínico, pero repetir lo que ha dicho su pareja puede ser una técnica realmente poderosa. Ambos les muestra que estás tratando de entender lo que están diciendo y, de hecho, hace que sea mucho más fácil hacerlo, al igual que es más fácil memorizar un hecho expresándolo en voz alta.
No es necesario estar de acuerdo entre sí. Se trata de entenderse unos a otros para que puedan empezar a avanzar hacia una solución. Si siempre tiene esto en cuenta como objetivo, es mucho menos probable que se encuentre discutiendo.
5. Practica ser claro
Nuestro último consejo es recordar que la comunicación es una habilidad y se necesita práctica para ser bueno en ella. Si desea desarrollar su capacidad para comunicarse como pareja, deberá desarrollar hábitos positivos en la forma en que habla y hacer un esfuerzo real para mantenerlos.
Algunos días serás mejor que otros, y algunos días no lo lograrás en absoluto. Pero si perseveras, descubrirás que, con el tiempo, tu capacidad para decir lo que piensas y escuchar cuando tu pareja te dice lo que tienen en mente mejora.
